Estamos viendo los contratos. No vamos a tratar todos ellos, porque son muchos y podríamos estar todo el curso analizando cada uno de ellos, así que creo que lo mejor es optar a los contratos que se podrán aplicar más de cara a futuro.
En estos últimos días han salido los datos sobre la Encuesta de Población Activa (EPA). Según estos datos, publicados por el INE, el paro ha decrecido en 70.800 personas, pero la ocupación sólo se ha incrementado en 69.900 personas. Los resultados son esperanzadores en cuanto al descenso del paro, aunque no en cuanto al tipo de contratación: los contratos temporales se han incrementado 127.800, y los indefinidos han decrecido en 34.900 (Datos del INE)
Una conclusión a priori es que esta reforma laboral ha sido un fiasco para la contratación indefinida, que provoca más temporalidad y menos estabilidad en el trabajo. El contrato indefinido ordinario se queda relegado como el último recurso, como una sanción si los contratos no los realiza el empresario "correctamente". El contrato estrella en esta reforma laboral es el contrato para el fomento de la contratación indefinida, que eso sí, no tiene bonificación para el empresario como antes.
Aquí os dejo la presentación de los contratos. Si queréis descargarla, pulsad en el enlace:
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